FEDERACION DE SINDICATOS DE QUELLON CHILOE
lunes, 14 de septiembre de 2009

El 21 de febrero en la Cámara de Diputados se intento terminar con la pesca de arrastre, pero los esfuerzos fueron insuficientes. Se acercan las elecciones parlamentarias y los pescadores artesanales no financian campañas.

Cuando se instalo la industria salmonera, la pesca artesanal sintió un terremoto que automáticamente hizo disminuir el sector en población. Como estrategia para debilitar a la pesca artesanal. La industria salmonera contrato pescadores artesanales, los mismos que forman parte de los más de 10000 cesantes.

Pero la industria salmonera no se ha quedado a manos cruzadas. La legislación hoy les permite crear las denominadas “áreas de manejo sanitario” que no son mas que barrios salmoneros destinados a enfrentar la gran crisis sanitaria que hoy tiene a Chile liderando el ranking de los productores mas tóxicos de salmón en el mundo.

Los barrios salmoneros están diseñados para impedir el avance de los pescadores artesanales en territorios pertenecientes legalmente a la pesca artesanal. Así es como gigantescos territorios donde históricamente han navegado pescadores artesanales o han instalado sus artes de pesca ya no se podrán navegar, ni mucho menos explotar en forma sustentable. Las riendas nuevamente las tienen los más grandes.

Pero lo más grave no radica en la entrega de territorios al empresariado, sino en la inminente privatización del mar chileno. El que permitirá a la industria entregar concesiones de acuicultura a los bancos en forma de hipoteca. Esto para acogerse a los millonarias cifras de dinero que instalo el Gobierno en las entidades bancarias para apalear la crisis de la salmonicultura. Si el negocio no funciona, simplemente las territorios pertenecerán a los bancos y estos los traspasaran a privados, negocio redondo.

Pero de la ley de pesca ni hablar. El cúmulo de vacíos legales es irrisorio, solo favorable para la industria salmonera, la que no da respiro y utiliza cada una de las triquiñuelas a su favor. Así es como un centro de cultivo contaminador por excelencia puede instalarse sin mayores complicaciones sobre un banco natural, incluso sobre especies hidrobiológicas endémicas o vulnerables. Da igual, los vacíos legales dan la autorización.

Los pescadores artesanales desde hace años practican la acuicultura a través de áreas de manejo. Estas áreas permiten cultivar y recolectar en forma sustentable recursos naturales a largo plazo. Donde en la mayoría de los casos han mejorado las condiciones del sector.


extracto del diario el ciudadano para ir al link pinche aqui

Etiquetas: