Exigen presencia de ministro del Trabajo tras cierre de planta de salmónidos
Ante el sorpresivo cierre de la planta de procesos de la pesquera noruega Marine Harvest, en el sector de Chinquihue en Puerto Montt, el jefe de bancada del Partido Socialista, Fidel Espinoza, exigió la presencia del ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade en la zona.
En ese sentido, informó La Segunda, el parlamentario criticó la defensa que el Gobierno ha hecho de las empresas salmonicultoras en el pasado, asegurando que cuando ésta ha atravesado por conflicto hay una inmediata respuesta del Ejecutivo.
"Exigimos lo mismo para los trabajadores y que el ministro Andrade se presente en la zona y que diga cómo el Gobierno va a contribuir en este tema", dijo el diputado, aludiendo a la indefensión en que quedaron cerca de 600 trabajadores tras la determinación de Marine Harvest.
"Hoy tenemos una planta que ha cerrado de manera unilateral y ha despedidlo a más de 600 trabajadores y que ha dejado a más de 2 mil personas sin el ingreso correspondiente para sustentar un hogar, lo que nos parece vergonzoso", dijo Espinoza.
En este sentido, el parlamentario cuestionó que "hoy muchas personas se molesten con lo que ha hecho la empresa Marine Harvest, cuando en el pasado con su silencio permitieron prácticas antisindicales y vulnerar los derechos de los trabajadores. Permitieron que este tipo de firmas siguieran acumulando riquezas sin respetar el medio ambiente y provocando con su irresponsable actitud lo que hoy está ocurriendo: la aparición del virus ISA y consiguiente despedido de los trabajadores".
"Quienes han callado también son responsables de esta crisis. Estamos acostumbrándonos a que cuando hay crisis en el sector productivo pagan siempre los trabajadores. Y resulta que cuando hay crisis de los salmonicultores el Gobierno corre de manera inusitada para defender sus intereses", planteó el parlamentarios por Puerto Montt.
"¡Cuántos millones de dólares han puesto por estas empresas, que no lo merecen y que a la primera crisis le pegan con el "mocho del hacha" a los trabajadores. Por eso es tan importante un royalty a este sector. Si tuviéramos este tributo tendríamos recursos para mitigar los efectos que está provocando la industria en el medio ambiente", dijo.
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Con tristeza y hasta con incidentes se produjo esta madrugada el cierre de la planta Marine Harvest en el sector de Chinquihue, en la comuna de Puerto Montt.
El cierre de la planta, anunciado inicialmente para el 30 de junio próximo, se anticipó 78 días para concretarse definitivamente anoche. Fueron los propios trabajadores quienes informaron que a partir de las cero horas de hoy dejó de operar definitivamente la planta, pese a que trascendió que la producción se paralizó pasadas las 16 horas de ayer viernes.
Poco antes de la entrada del turno de noche, que se iniciaba a las cero horas de hoy, ejecutivos de Marine Harvest fueron comunicando a unos 350 trabajadores de esta medida, luego de lo cual comenzaron a ser finiquitados.
Cabe señalar que en esta planta trabajan un total de 600 trabajadores. La totalidad de los empleados sería notificado a partir de las 8 horas de hoy, durante la entrada del turno de la mañana. Se espera que una vez finalizado este proceso, la medida sea informada oficialmente a través de un comunicado de prensa, informó esta madrugada una fuente de la empresa.
Quien estuvo a cargo de la comunicación directa a los trabajadores fue Peter Gillies, director de Recursos Humanos de la transnacional.
DISTURBIOS
El proceso no estuvo excento de incidentes, los que fueron protagonizados por la presidenta del Sindicato Nº2 Marina Alvarado y el secretario del mismo sindicato, Jaime Coronado, quienes increparon duramente a los ejecutivos al momento de ser notificados de la medida.
Precisamente, según reconoció Alvarado, el dirigente Jaime Coronado rompió un vidrio en el interior de la planta, en las proximidades del Casino, lo que motivó la presencia de Carabineros en el lugar, los cuales como primera medida lo detuvieron y trasladaron hasta una unidad policial.
En tanto, a la salida de la planta la dirigenta Marina Alvarado arrojó huevos a las camionetas de los ejecutivos que se retiraban del lugar.
La dirigenta había reconocido momentos antes a la prensa que durante el día viernes sostuvieron la última reunión con el abogado laboral de la empresa, quien les había reconocido que a los trabajadores con más de 11 años en la planta que fueran finiquitados se les iban a cancelar todos sus años de servicio, como asimismo que la planta Chinquihue se mantendría en funcionamiento hasta el 30 de junio, lo que no ocurrió.
"Nos sorprendió el cierre en este momento, porque nosotros somos dirigentes y representamos a la mayoría de los trabajadores de la planta de Chinquihue y no...fue una cosa sorpresiva, fue una puñalada más de la empresa Marine Harvest", sostuvo Alvarado.
La misma trabajadora reconoció que muchos de sus colegas tomaron con tristeza el anuncio.
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